En el marco de su segundo encuentro del año, la Fundación Centro Nacional de Desarrollo e Investigación en Telecomunicaciones (Cendit), ahondó en temas de suma importancia para el país en materia de energía nuclear, que se llevan a cabo a través del Programa de Cooperación Técnica (PCT) del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA).
A cargo de Yaremi Gamboa, jefa de la Unidad de Propagación y Antenas en la institución y asistente nacional en la Oficina Nacional de Enlace en Venezuela ante el OIEA; quien desempeña labores en la coordinación e implementación de los programas de cooperación técnica del organismo en el país. Con la presencia de todos los trabajadores y trabajadoras se crea este espacio para intercambiar conocimientos y actualizar al personal en información relevante que los involucra
directa o indirectamente.
El PCT es el mecanismo principal por el que se transfiere tecnología nuclear a los Estados que forman parte del OIEA, a partir de sus necesidades como nación y se les ayuda a atender prioridades clave para su desarrollo en diversas áreas mediante el uso de estas tecnologías con fines pacíficos. Este programa se centra en transferir conocimientos, tecnología y equipamiento; además fortalece las capacidades humanas e institucionales de cada uno de sus miembros.
Gamboa señaló que Venezuela forma parte del OIEA desde sus inicios en el año 1957 y que al ser miembro, participa activamente en proyectos y actividades del PCT en diversas áreas, como salud, agricultura, ambiente y aplicaciones industriales de la tecnología nuclear. De esta manera, mencionó que actualmente el país emplea una variedad de proyectos que abarcan campos cruciales para su desarrollo como “Atoms4Food”, una iniciativa empleada para aumentar la seguridad alimentaria y mejorar los cultivos mediante aplicación de tecnologías nucleares.
Asimismo, el proyecto “Hidrología Isotópica”, se encarga del uso de técnicas que emplean isótopos (átomos con el mismo número de protones pero diferente número de neutrones) para estudiar el ciclo del agua y así abordar problemas relacionados con la gestión de los recursos hídricos. Un tema imprescindible para el país es la salud, por ello el Estado venezolano integra el proyecto “Rayos de Esperanza”, a fin de mejorar el diagnóstico y tratamiento de enfermedades, especialmente el cáncer, mediante técnicas de medicina nuclear y radioterapia.
Finalmente, Venezuela participa en el proyecto “Nutec Plastics”, como una iniciativa para abordar el problema mundial que supone la contaminación por plásticos, particularmente los microplásticos en el punto de origen, mediante la introducción de nuevas tecnologías para mejorar el reciclaje de estos, y en el océano, donde termina el grueso de los desechos.
Se puede decir entonces que proyectos como estos ejemplifican cómo la aplicación pacífica de la tecnología nuclear, a través de la cooperación internacional, aborda desafíos nacionales críticos en materia de seguridad alimentaria, gestión de recursos hídricos, salud y protección del ambiente,para fortalecer no solo las capacidades técnicas e institucionales de Venezuela, sino también impulsar soluciones innovadoras y sostenibles para el bienestar de la población y el progreso del país.
Prensa Cendit/ Isabel Hernández