(Caracas, 6 de octubre de 2025).- La Universidad Simón Bolívar (USB) avanza en un proyecto de investigación para identificar y analizar la contaminación en distintas zonas urbanas de la ciudad de Caracas y del estado La Guaira, utilizando tecnologías no invasivas.
Este proyecto, titulado Estudio integrado de magnetismo de rocas, resonancia paramagnética electrónica, métodos electromagnéticos y análisis geológicos para determinar contaminación en zonas urbanas, es financiado por el Ministerio para Ciencia y Tecnología, a través del Fondo Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (Fonacit) y está liderado por la doctora en Física, Milagrosa Aldana.
La iniciativa es realizada desde el Laboratorio de Paleomagnetismo de Rocas de la USB, que en el pasado se enfocaba principalmente en estudios de susceptibilidad magnética para determinar la presencia de acumulaciones de hidrocarburos bajo la superficie.
«Al principio nosotros hacíamos estudios de susceptibilidad para determinar lo que hay debajo de la superficie, en este caso si había acumulaciones de hidrocarburos. En eso somos pioneros y además comenzaban a usarse estas medidas para estudios relacionados al medio ambiente, un problema básico», indicó Aldana, quien es licenciada en Física, mención Geofísica de la USB.
Una de las características principales de la investigación es el uso de técnicas no invasivas como lo son la resonancia paramagnética electrónica, métodos electromagnéticos y análisis geológicos. Estos métodos permiten realizar un análisis exhaustivo de la contaminación sin dañar el entorno y también facilitan la identificación de las fuentes de contaminación, lo que resulta en una gestión ambiental más eficiente.
«Todos estos métodos son no invasivos, nosotros tomamos las muestras, hacemos las medidas en sitio y no dañamos en absoluto todo el entorno. El conocer dónde están las zonas y el saber cuál es el origen de la contaminación permitirá una mejor gestión ambiental», agregó.
Para este proceso, que se desarrolla en alianza con el Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (IVIC), Aldana, junto con un grupo de estudiantes, utilizan muestras de suelo que se consiguen tras barrera el polvo urbano.
«Adicionalmente, también tomamos muestras de suelo de superficie, de por ejemplo rendijas de la zona, y si hay materos o parques, tomamos muestras de superficie someras y de profundidad para ver cómo va variando la contaminación a medida que profundizamos», explicó Aldana.
Los trabajos se realizan en diversas zonas de Caracas, como la Zona Industrial de Los Cortijos, la Zona Industrial de Petare, así como en Carmen de Uria, ubicada en La Guaira.
De igual forma, se tienen como zonas pilotos de áreas no contaminadas el Parque Generalísimo Francisco de Miranda y el Parque Alí Primera.
Hasta los momentos, se cuenta con resultados los estudios analizados en el Parque Generalísimo Francisco de Miranda Carmen de Uria y la Zona Industrial de Los Cortijos. «Estamos muestreando la Zona de Petare y aún nos falta el Parque del Oeste», añadió.
La doctora Aldana destacó la accesibilidad económica de las técnicas empleadas en este estudio, resaltando la importancia de su implementación para el monitoreo constante de las zonas afectadas por la contaminación.
«Es algo no tan costoso, porque recoger las muestras de suelo no implica nada, pero si uno quiere hacer monitoreo en ciertas zonas, muchas veces implica perforación. Con equipos de medición de datos electromagnéticos que no son invasivos, podemos tener resultados», señaló.
Uno de los principales objetivos del proyecto es identificar las partículas contaminantes que podrían tener un impacto directo en la salud pública, los cuales pueden desencadenar distintas enfermedades, entre ellas el cáncer.
Mincyt / Prensa / AE







