Por Gabriela Jiménez Ramírez.- Una serie de estudios recientes han descubierto que los microplásticos están presentes en diferentes órganos del cuerpo humano. En los últimos años se detectó que estas partículas comenzaron a ser digeridas a través de alimentos, logrando penetrar nuestro sistema digestivo.
Estas partículas se han encontrado en las placentas humanas. En un estudio desarrollado por un grupo de investigadores de Ciencias de la Salud de la Universidad de Nuevo México en Estados Unidos, se analizaron más de 60 placentas donde encontraron grandes concentraciones de microplásticos.
La investigación fue publicada por la revista Toxicological Sciences y el equipo de científicos está conformado por Matthew Campen, Marcus García, Eliane El Hayek, Eliseo Castillo, entre otros.
Las placentas analizadas en este estudio se recolectó entre 2011 y 2015. Descubrieron que el polímero más frecuente en el tejido placentario era el polietileno, utilizado para fabricar bolsas y botellas de plástico.
En concreto, aproximadamente el 50% de las muestras mostraron presencia de nueve o más polímeros medidos. Además del polietileno, se detectaron cloruro de polivinilo, el nailon y el polipropileno.
Este hallazgo de microplásticos en placentas humanas se podría correlacionar con efectos adversos para la salud de la madre y el bebé.
¿Cómo se encuentran los microplásticos en la placenta?
Se han encontrado microplásticos en todas las partes de la placenta, incluyendo las membranas maternas, fetales y amniocoriales.
Para esta investigación, los científicos utilizaron una nueva técnica que permite separar eficazmente el material biológico de los plásticos. También utilizaron microscopía de fluorescencia y recuento automatizado de partículas
El documento presentado por la revista científica detalla que cada elemento de la placenta pasó por una ultracentrífuga, lo que dejó una pequeña partícula de plástico en el fondo de un tubo, para luego hacer uso de una técnica llamada pirólisis, colocaron la partícula de plástico en un recipiente metálico y la calentaron a 600°.
Posteriormente, capturaron las emisiones de gases a medida que los diferentes tipos de plástico se quemaban a temperaturas específicas.
El estudio señala que el predominio de la detección del polietileno en las muestras de las placentas humanas refleja la abrumadora abundancia de este polímero en el medio ambiente y su amplia producción y uso en los Estados Unidos.
Microplásticos en seres recién nacidos
Otro estudio realizado por científicos de la Universidad de Rutgers, en Estados Unidos, reveló partículas de microplásticos en cuerpos de seres vivos recién nacidos. El experimento fue realizado en una primera fase en roedores y publicado por el portal Science of the Total Environment.
Para realizar esta investigación, las madres de esta camada de ratones recién nacidos analizados, fueron sometidas durante la gestación a un proceso de inhalación de poliamida-12. Cuando los ratones nacieron, los científicos detectaron estas partículas en el cuerpo de seis de sus crías.
Estas partículas fueron encontradas en los pulmones, corazones, hígados, riñones y cerebros. Los resultados de este estudio demuestran la translocación de microplásticos materno-fetal que permanece en los cachorros jóvenes independientes de dos semanas.
