El cerebro, el sistema nervioso entérico, la microbiota y el intestino, tienen relación con la salud mental del ser humano, así lo indicó la vicepresidenta sectorial de Ciencia, Tecnología, Educación y Salud, Gabriela Jiménez Ramírez.
A través de su cuenta en la red social X, explicó que diversas investigaciones han revelado posibles vínculos entre la microbiota y trastornos neuropsiquiátricos como estrés, depresión y ansiedad.
“El microbioma humano está compuesto por una comunidad diversa de microorganismos que habitan en el cuerpo, y esto tiene un impacto en la salud y el funcionamiento del organismo, debido a que estos incluyen bacterias, virus y hongos que se encuentran en el intestino y otras partes del cuerpo”, señaló en la publicación.
Asimismo, detalló que las neuronas no solo están en el cerebro, sino que también existen células que abundan en el tracto digestivo y se agrupan en dos plexos: el submucoso y el mientérico, ambos descubiertos a finales del siglo XIX por los fisiólogos alemanes: Meissner y Auerbach.
En ese sentido, señaló que la unión de estas células forman el llamado “sistema nervioso entérico” (SNE). “El SNE forma parte del sistema nervioso autónomo, lo que implica que ‘va por libre’. Es decir, no podemos modificar sus acciones a voluntad, como tampoco podemos hacerlo con nuestro ritmo cardíaco”.
Detalló además, que el SNE controla intrínsecamente (desde dentro del tubo) todas sus funciones, “aunque estas son moduladas por el Sistema Nervioso Central (SNC) y las hormonas, además de las células inmunes y la microbiota”.
La también ministra del Poder Popular para Ciencia y Tecnología apuntó que el denominado eje intestino-cerebro explica las “mariposas en el estómago” que las personas sufren ante situaciones de estrés emocional, y además, sus alteraciones están relacionadas con trastornos funcionales como el síndrome de intestino irritable y algunas enfermedades neurodegenerativas, como el mal de las vacas locas y Parkinson.
La relación SNE, microbiota, intestino y la salud mental
La vicepresidenta sectorial destacó que las investigaciones entre microbioma y los trastornos neuropsiquiátricos han revelado conexiones prometedoras, entre ellas la eubiosis y la disbiosis.
La eubiosis se refiere al estado de equilibrio y armonía en la composición del microbioma, donde las diferentes especies bacterianas interactúan de manera favorable con el huésped. En este estado, las bacterias beneficiosas predominan y contribuyen a la salud general, al mantenimiento de una función intestinal óptima y a la regulación del sistema inmunológico.
“La eubiosis es esencial para un bienestar adecuado y puede influir en la función neuropsiquiátrica normal”, dijo.
Explicó sobre la disbiosis, que representa un desequilibrio en la comunidad microbiana, es caracterizado por cambios en la diversidad, abundancia y composición de las especies bacterianas. Esta puede ser causada por diversos factores, como una dieta poco saludable, el estrés crónico, el uso excesivo de antibióticos y el entorno, entre otros.
“Estos desequilibrios pueden tener consecuencias negativas para la salud. La depresión, el estrés y la ansiedad son trastornos neuropsiquiátricos ampliamente estudiados que afectan significativamente la calidad de vida de millones de personas en todo el mundo”, puntualizó.
Oficina de Gestión Comunicacional del Ministerio del Poder Popular para Ciencia y Tecnología / Periodista: Ghiccelle Chacín