Una nueva investigación realizada por un equipo multidisciplinario e internacional detectó el primer orgánulo fijador de nitrógeno conocido dentro de una célula eucariota, un hecho considerado como el cuarto caso registrado en la historia de endosimbiosis primaria.
La ministra del Poder Popular para Ciencia y Tecnología, Gabriela Jiménez Ramírez, hizo referencia a este hallazgo que fue publicado en la portada de la revista Science.
Al respecto, escribió en su cuenta en X, que: “Las células eucariotas son notablemente complejas; por ejemplo, tienen varios organelos, que son estructuras unidas a membranas con funciones específicas”.
Agregó que “dos de estos organelos, las mitocondrias y los cloroplastos, que funcionan en la respiración y la fotosíntesis, evolucionaron a partir de la integración de bacterias endosimbióticas en la célula eucariota”.
La ministra explicó que “en los sistemas marinos, algunas bacterias fijadoras de nitrógeno son endosimbiontes de microalgas, como Candidatus Atelocyanobacterium thalassa (UCYN-A), un simbionte cianobacteriano del alga unicelular Braarudosphaera bigelowii”.
También hizo referencia a lo expuesto por Tyler Coale, investigador postdoctoral en la Universidad de California Santa Cruz, y primer autor de uno de los dos artículos reciente, en el que precisa que se forma “una estrecha integración del endosimbionte en la arquitectura y función de la célula huésped, que es una característica de los organelos. Estos hallazgos muestran que UCYN-A ha evolucionado de un simbionte a un orgánulo eucariota para la fijación de nitrógeno (el nitroplasto), expandiendo así una función que se pensaba que realizaban exclusivamente las células procarióticas a los eucariotas”.
Finalizó, afirmando que “el estudio de la evolución de la célula eucariota sigue siendo apasionante y detonante para la vida que hay conocemos”.
Oficina de Gestión Comunicacional del Ministerio del Poder Popular para Ciencia y Tecnología / Periodista: Vanessa Gutiérrez.
