Un reciente estudio, desarrollado por investigadores del Instituto Federal Suizo de Tecnología y de la Universidad de Exenter, respalda la idea de que los sistemas inmunitarios son capaces de crear genes específicos para enfrentar a microbios comunes, como los que se encuentran en los alimentos.
El análisis compartido por la vicepresidenta sectorial de Ciencia, Tecnología, Educación y Salud, Gabriela Jiménez Ramírez, a través de su cuenta en la red social Twitter, señala que teorías anteriores sugerían que los péptidos microbianos (una especie de antibióticos natural) tenían la función de eliminar una serie de bacterias.
La nueva investigación reveló que el sistema inmunitario de la Drosophila (mosca de frutas) se ve afectado por las bacterias presentes en su alimentación (frutas, hongos y plantas) y en su entorno.
Para determinar esto, los especialistas descubrieron dos péptidos que controlan, cada uno, una especie bacteriana común a las moscas (Diptericina A y Diptericina B). Estos péptidos microbianos se dan en el medio natural del insecto dependiendo del recurso alimentario que usen y del entorno en que se encuentren.
Por ejemplo, la Diptericina B puede controlar la Acetobacter, un género de bacterias capaces de formar ácido acético bajo varias condiciones. Este es fundamental para eliminar bacterias especificas en la mosca que de otro modo causarían daños.
El estudio muestra cómo los sistemas inmunitarios evolucionaron en respuestas a ello para controlar bacterias comunes que de otro modo causarían daños.
“Extraordinario artículo, cada día es más fascinante y complejo el abordaje y compresión del Microbioma. La evolución va determinando la historia (…) nuestro sistema inmune no solo da forma a nuestro microbioma, nuestro microbioma da forma a nuestro sistema inmunológico”, escribió la vicepresidenta sectorial en la red social.
Oficina de Gestión Comunicacional del Ministerio del Poder Popular para Ciencia y Tecnología / Periodista: Ghiccelle Chacin
