Las enfermedades autoinmunes son aquellas en las que el sistema inmunitario se vuelve contra las propias células y tejidos sanos, causando inflamación y daño a la salud.
Hasta ahora, la ciencia no ha podido encontrar una cura para este trastorno, solo cuenta con tratamientos que buscan controlar los síntomas y evitar complicaciones. Sin embargo, diversas investigaciones avanzan en un nuevo mecanismo de acción, que incluye fármacos, para revertir la autoinmunidad y eliminar selectivamente la enfermedad.
Un artículo publicado en la revista Nature, reseña la investigación realizada por el inmunólogo de la Universidad de Calgary en Canadá, Pere Santamaría, basada en el uso de unas nanopartículas, recubiertas con proteínas que actúan como dianas para los linfocitos T, que son las células inmunitarias responsables de la autoinmunidad.
Estas nanopartículas se administran por vía intravenosa y son capaces de llegar al bazo, donde se encuentran los linfocitos T. Allí, se unen a los linfocitos T que reconocen las proteínas propias del organismo como extrañas y los reprograman para que se conviertan en linfocitos T reguladores, que son las células que mantienen la tolerancia inmunológica y evitan la autoinmunidad.
Los investigadores han probado este método en ratones con diferentes tipos de enfermedades autoinmunes, como la artritis reumatoide, la esclerosis múltiple, la diabetes tipo 1 y el lupus, y han observado que las nanopartículas son capaces de inducir una remisión duradera de la enfermedad, sin efectos secundarios ni toxicidad.
Además, las nanopartículas son específicas para cada enfermedad, es decir, solo actúan sobre los linfocitos T que causan esa enfermedad y no afectan al resto del sistema inmunitario, lo que evita el riesgo de infecciones o cáncer.
Otras investigaciones están intentando eliminar selectivamente las células problemáticas o introducir células inmunitarias supresoras que han sido diseñadas para atacarlas; uno de ellos es el método basado en células inmunitarias diseñadas para tratar a 15 personas con lupus u otros trastornos inmunitarios con un éxito sorprendente.
“Si más ensayos en personas muestran resultados positivos, podrían cambiar vidas», dice Maximilian Konig, reumatólogo de la Universidad Johns Hopkins en Baltimore, Maryland, que se especializa en trastornos autoinmunes.
Asimismo, afirma que las terapias que existen para estas enfermedades son terribles, y no siempre funcionan.
Al respecto, los diversos especialistas consideran que estas investigaciones representan un gran avance en el campo de la inmunología y abre la puerta a nuevas terapias personalizadas y seguras para las enfermedades autoinmunes.
Sin embargo, advierten que se necesitan más investigaciones y ensayos clínicos para confirmar la eficacia y la seguridad de este método en humanos.
Agencias Internacionales.