Un estudio de la Universidad de California publicado en el sitio web MedRxiv, sugiere que la persistencia viral del SARS-CoV2 pudiera estar asociada con alteraciones inmunitarias de larga duración y con covid prolongado.
Según el documento, algunas personas no recuperan su estado de salud inicial después de la infección por SARS-CoV2. “Después de la fase aguda, estas personas pueden experimentar una mayor carga de nuevas condiciones médicas, como enfermedades cardiovasculares o diabetes mellitus”.
Michael Peluso de la División de VIH, Enfermedades Infecciosas y Medicina Global de la Universidad de California, informó que en el estudio fue realizado por emisión de positrones (PET) de cuerpo entero para observar el ARN del SARSCoV-2 en tejidos de pacientes tras 158 a 676 días de sufrir covid-19.
“Realizamos imágenes de tomografía por PET de cuerpo entero en una cohorte de 24 participantes en puntos de tiempo que oscilaron entre 27 y 910 días después de la infección aguda por SARS-CoV-2 usando un nuevo agente radiofarmacéutico, un trazador altamente selectivo que permite la cuantificación anatómica de linfocitos T activados”.
Asimismo, indicó que la captación del marcador en el grupo post-agudo de covid fue significativamente mayor en comparación con los controles prepandémicos en muchas regiones anatómicas, “incluido el tronco encefálico, la médula espinal, la médula ósea, el tejido linfoide nasofaríngeo e hiliar, tejidos cardiopulmonares y pared intestinal”.
Peluso, también resaltó que la captación del marcador aumentó en los participantes con imágenes hasta 2,5 años después de la infección por SARS-CoV-2. “Observamos que la activación de las células T en la médula espinal y la pared intestinal se asoció con la presencia de síntomas de covid prolongado”.
Igualmente, manifestó que los resultados del estudio proporcionar evidencia de la activación del sistema inmunitario a largo plazo en varios tejidos específicos después de la infección por SARS-CoV-2, incluso en aquellos que experimentan síntomas prolongados de Covid.
“Identificamos que la persistencia del SARS-CoV-2 es un factor potencial de este estado inmunitario activado en curso, y mostramos que el ARN del SARS-CoV-2 puede persistir en el tejido intestinal durante casi 2 años después de la infección inicial”, destacaron.
Finalmente, precisa que “estas observaciones desafían el paradigma de que COVID-19 es una infección viral aguda transitoria y proporcionan evidencia de activación de células T y persistencia viral en tejidos mucho más allá de la enfermedad inicial”.
Oficina de Gestión Comunicacional del Ministerio del Poder Popular para Ciencia y Tecnología / Periodista: Nailet Rojas Garcia -Fotografías: Cortesía.

